Los días y las frases: autoritas, potestas, imperium, significado.

El
poder ¿se tiene o se ejerce? ¿lo tomas o te lo dan? Muchos lo detentan. En cualquier caso el dilema viene de atrás...
Ya los
Romanos distinguían tres tipos de poder, quien poseía los tres era el
Emperador, el poder absoluto, un
dios en la Tierra. Y no era para menos.
La potestad (potestas) es el dominio o poder jurídico, era la capacidad que tenían los magistrados romanos para actuar sobre los asuntos de los romanos, pero en el ámbito civil.
Atención al apunte etimológico, viene de la raíz indoeuropea pot (poder, posibilidad, capacidad para). Los déspotas, los despotikós δεσπότης , son aquellos que abusan de su poder o autoridad. Los despotikós eran los dueños o señores de la casa (dems, domus; casa y potis, posis, señor, dueño, marido). Se debe hilar muy fino, como veis.
Pero Roma, estaba muy militarizada. Funcionó, de hecho, mientras estuvo en la fase de conquista, la guerra era el motor del Imperio. De manera que los
magistrados no tenían potestad sobre el ejercito. Ya entonces existía una --rudimentaria, pero efectiva--
separación del poderes (fundamental para que las cosas no solo sean más justas sino para que funcionen, porque los romanos eran sobre todo funcionales, prácticos). El poder militar era el
imperium. La famosas legiones eran comandas por los
cónsules, que fueron cargos electos, pero efectivamente eran mandadas por los profesionales del ejercito, los
legatus.
Y de ahí lo del
Imperio Romano.
Y el tercer tipo de poder, el más sutil es el de la
auctoritas. Frente al poder legal de los magistrados, la
potestas, o el
poder militar estaba la autoridad de las «autoridades», de los expertos, de los ilustres, de los que eran respetados por su
dignidad, sus conocimientos y su experiencia. Etimológicamente, la autoridad está emparentando con el aumentar, con el crecer.
Cada uno basa su legitimidad en un aspecto:
ley y fuerza frente al prestigio y conocimiento. Vencer e imponer o convencer. Generalmente, suele vencer el
Imperium...